Cómo proporcionamos alivio en caso de desastres

Cuando ocurre un desastre, las víctimas necesitan ayuda inmediata. Pero proporcionar ayuda de emergencia es sólo el primer paso en nuestra ayuda humanitaria. También preparamos el camino para que las personas superen su difícil situación a largo plazo y eviten nuevas crisis.

La principal prioridad de nuestra asistencia humanitaria es rescatar a los niños y proteger sus derechos, porque ellos los más jóvenes de la sociedad son especialmente vulnerables a los desastres. Para asegurar que la ayuda sea proporcionada de la manera más eficiente posible, involucramos a las personas del lugar en la planificación e implementación de todas las actividades, y trabajamos en red con socios que tienen mucha experiencia.

La ayuda de emergencia se proporciona tan pronto como sea posible después de un desastre. Las víctimas necesitan alimentos, ropa y todo lo que es esencial para sobrevivir. Prestamos especial atención a las necesidades propias de los niños y  jóvenes y hacemos lo que sea necesario para garantizar que la ayuda les llegue.

La nutrición es un área prioritaria. Los niños que están desnutridos necesitan alimentos de alto valor energético para sobrevivir a estas situaciones de emergencia sin causar aún más daños a largo plazo a su salud. Se ofrecen alimentos especiales para los bebés y se ayuda a las madres a amamantar a sus bebés. Es más, en medio de la agitación y la miseria de los refugios de emergencia, se deben tomar medidas especiales para proteger a los niños de la violencia y la enfermedad.

Para dar a los niños la mejor asistencia posible durante y después de los desastres, establecemos espacios amigables para niños, áreas especiales - a menudo dentro de refugios de emergencia - donde los niños reciben protección, comida, lecciones escolares, oportunidades para jugar y atención médica y psicológica. El objetivo aquí es proporcionar a los niños una rutina diaria estructurada y crear una base de confianza que les permite sentirse seguros en una situación de incertidumbre.

En situación de desastres, ayudamos a restablecer los medios de subsistencia, principalmente con actividades generadoras de ingresos y estructuras educativas.Mientras más pronto los niños tengan la oportunidad de regresar a la escuela, más pronto tendrán la oportunidad de volver a llevar una vida normal y prepararse para un futuro mejor.Todas nuestras actividades se planifican y organizan en estrecha cooperación con los organismos gubernamentales pertinentes de los países de destino y con la participación de las personas directamente interesadas.

Ya durante la etapa inicial de gestión en crisis, tomamos las medidas necesarias para asegurar un desarrollo de proyectos a largo plazo. La gente en el terreno necesita volver a ser autosuficiente lo antes posible, y es necesario evitar un largo período de dependencia de ayuda externa. Por ejemplo, les ayudamos a salvaguardar sus medios de subsistencia. También promovemos el establecimiento de instituciones para la salud y la educación, siempre y cuando las personas y su gobierno puedan sostenerlas independientemente a largo plazo. Promover ese desarrollo también es parte integral de nuestra reducción del riesgo de desastres. Los terremotos, cosechas perdidas y otras calamidades tienen consecuencias particularmente graves para las personas débiles y desprotegidas por la pobreza y falta de oportunidades de participación.

Cuando ocurre un desastre, Kindernothilfe trabaja con organizaciones locales experimentadas con las que colabora con también en situaciones que no son de crisis. Están familiarizados con la cultura, las personas, las necesidades y problemas especiales de la población. Además, las organizaciones locales permanecen en el terreno a largo plazo, incluso después de que la crisis deja de contar con la atención internacional, y su proximidad a las personas en la zona de desastre genera confianza.

También es importante para el éxito de la ayuda humanitaria, cooperar estrechamente con otras organizaciones de ayuda, por lo que nos unimos a otros, por ejemplo, en las Obras de Desarrollo de la Alianza (BEH). Entre los miembros adicionales se encuentran Bread for the World, Christoffel-Blindenmission, medico internacional, Misereor, terre des hommes y Welthungerhilfe.

Todas las organizaciones de la alianza basan su labor en protocolos de acciones de ayuda humanitaria recomendados internacionalmente, el más importante de los cuales es el Código de Conducta, establecido por la Cruz Roja Internacional y la Media Luna Roja Internacional en colaboración con las principales ONG internacionales en 1994.